domingo, 13 de mayo de 2007

Felicidad, qué bonito nombre tienes...

Dicen los que saben que existen tantas formas de felicidad como personas. Como no podía ser de otra manera, tanta diversidad da lugar a muchas curiosidades, paradojas, etc...Si encuentran un hueco en sus -seguro estresantes- vidas, pueden reflexionar conmigo:

Dejando a un lado a aquellos que directamente renunciaron a ello, y a aquellos otros que se limitan a subsistir, de casa al trabajo y del trabajo a casa -siempre con prisa, sin saber muy bien porqué-, ¿Se han parado a pensar alguna vez en qué hace la gente para ser feliz? ¿Cómo ocupamos nuestro tiempo para conseguir autorrealizarnos? Y sobre todo, ¿lo hacemos por algún motivo?, ¿forma parte de algún plan personal para conseguir la tan ansiada felicidad, o actuamos meramente por inercia, tomando la decisión menos arriesgada en cada momento, sin ni siquiera preguntarnos qué es lo que realmente queremos?

Más de una vez ,estando en clase, he posado el bolígrafo sobre la mesa dejando de tomar apuntes y me he preguntado qué estaba haciendo allí, si realmente eso me hacía feliz y si me encontraba en ese aula como parte de un camino que yo mismo voy trazando o simplemente he llegado hasta aquí por ser lo más habitual, aquello que menos rompe los esquemas de esta sociedad. Disto mucho -me temo- de encontrar la respuesta.

Tan grave, o mas aún, como el miedo a romper con todo, cuando ese todo ya no nos hace felices, es esa costumbre tan humana de buscar la felicidad, que en nuestro interior no hallamos, en situaciones o hechos que no podemos controlar, ya que estos pueden contribuir, pero jamás sustituir. Y es grave porque tarde o temprano degenera en frustración. Me explico: es muy común confiar nuestra felicidad a otra persona. Y eso por no hablar de los que se la confían a un club de fútbol, a un montón de euros, o a un trabajo que monopoliza sus vidas.

Me he dado cuenta -nose si os pasará a vosotros- de que cuando tengo un problema que realmente podría, debería, quitarme el sueño, intento hacer como si no existiese y busco esa felicidad de la que me priva de otra forma. Y salvo cuando esa otra forma fue una chica, huelga decir que no me ha dado resultados.



PD: Qué fácil escribir y qué difícil actuar...

11 comentarios:

kota dijo...

En estos casos yo aplico "la regla del pañal"; Piensa en lo que estás haciendo, y qué opinión tendrás de ello cuando tengas 80 años, y estés 8 horas pegado al televisor, con un pañal puesto, porque no te puedes mover.
A veces, también se hacen cosas tediosas (por ejemplo, coger apuntes), pero se supone que tu título te llevará a donde tú quieres (Lo escogiste tú, ¿No?).
Y respecto a los problemas, trata de darles la importancia que tienen; No sé exactamente a cuáles te refieres, si son de exámenes, o algo así.. En cualquier caso la gran mayoría no sean nada comparados con que medio mundo se muere de hambre.

Me ha gustado el post.
Saludos!
kota.

Anónimo dijo...

Siempre que leo alguna de tus entradas !haces que me sienta tan bien! Alguien capaz de pensar y sentir con esa intensidad, lógicamente, siempre va a estar lleno de preguntas (solo con hacertelas ya has recorrido lo mas importante del camino).Para algunas la respuesta es facil, para las importantes, se puede tardar una vida en encontrarla y tienes que buscarla, como tu bien dices, dentro de tí.
Eres tan joven...Tienes tanto tiempo por delante para buscar...equivocarte...rectificar..volver a intentarlo...
Esa busqueda en la que estas es normal con tu edad, aunque son muy pocas las personas que se hacen estas preguntas y la mayor parte solo se deja llevar.
Piensa que son muy pocas las cosas por las que merece la pena perder el sueño y piensa, también que "la felicidad" muchas veces es como "el futuro", algo con lo que compran nuestra libertad y nos atan a un modelo de sociedad. A mi me gusta mas hablar de satisfacción y eso lo da el "ser" no el "tener" y, por lo que se desprende de tus reflexiones, de "ser" estas sobrado.
Aunque es bueno que tengas tu las riendas de tu vida, piensa que el paso del tiempo pone las cosas en su sitio y para lo que hoy te parace una pesadilla, mañana puedes encontrar una solución satisfactoria. Recuerda lo que dijo alguien "me he pasado la vida sufriendo por cosas que luego nunca llegaron a suceder". Intenta trazarte un plan y deja tu cabeza reposar, por lo menos de vez en cuando. Te lo debes y te lo mereces

Luisete dijo...

"la felicidad muchas veces es como el futuro, algo con lo que compran nuestra libertad y nos atan a un modelo de sociedad"

No puedo estar mas deacuerdo con esa afirmación.

Un saludo Ángela, mas conocida por mí como mamá.

Anónimo dijo...

entiendo, y posiblemente todos los que leen esto tambein, lo que querés decir, de una manera totalmente perfeectiiisima. (ooh)
yo creo, al igual que mi gran inspirador Ernesto Sábato, que al felicidad no existe y que solo existen momentos felices.... esto me hace acordar a lo que decía mi lindiiisimo John "life is what happens to you while you are bussy doing other plans". Nose como que realmente las cosas lindas son demasiado pocas y duran poco y se hunden en la rutina y en los deberes (no entendidos como deberes morales), y en las mierdas que nos pasan. Yo decidí hace un tiempo, sobre todo con todo esto de la carrera, que iba a hacer algo que poueda disfrutar y no solo ahora, sino el resto de mi vida. creo que la clave está en conocerse a uno mismo... y ahora puedo citar al famoso oráculo de delfos que nos gritaba que nos conociecemos a nosotros mismos.
aveces no sabemos porque actuamos ni si lo que hacemos está bein; creo que cuanto mas claro tengamos lo que queremos, mas vamos a encontrar eso que buscamos, que son las pequeñas cosas, brevisimos momentos que nos hacen felices. o todo esto es lo que espero.... y ultimamente lo creo firmemente.

bueno, luis, escribís barbaro! espero que algun dia escribas un libro ;) yo lo voy a comrpar!! jaja
un besoo y espeor uqe mi psot no haya resultado ser una verrrrrgaaaaa

Esther dijo...

Que bonito Luis, tu capacidad de reflexionar, de estar tan lejos de lo habitual. Mi más sincera enhorabuena.

Anónimo dijo...

"Este mundo constituye la promesa de una felicidad única que no estamos suficientemente preparados para comprender."

Dicho por un sabio alejandrino.

¡Muy buena reflexión!

Besarkada handi bat!

Anónimo dijo...

hermanito mucha suerte en tus exámenes... ya sabes, con un par de wevos y al toro...!
enga que ya mismo estás en Estambul mamoncete!!que kara que tienes...!!

your sister

Helios dijo...

Me aburro ESCRIBE!!!!!!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

Me he enterado de tu blog mediante unos amigos comunes y buscando en internet,cada vez te pareces más a Paco Aguila, que profundidad!

PD: soy Manuela, no dejes de hacerte gayolas

Luisete dijo...

No se si debería tomarme este último comentario como un halago o más bien todo lo contrario...En cualquiera caso Manuela, podrías revelenarnos tu verdadero nombre no?
Eso del anonimato no acaba de convencerme...

conchi dijo...

Lo que está claro, es que cada uno, nos tenemos que fabricar nuestro vestido de la felicidad ,para llevarlo siempre puesto y a nuestra medida y confeccionarlo nosotros mismos a nuestro gusto
un beso .